to, y cargado el bastimento en los navíos, hizo nuestro capitán que se reuniese toda la gente y de los 400 hombres separó 300 bien armados, y á los 100 los dejó en la antedicha ciudad Vordelesso(Fortaleza), esto es, Nostra Singnora de Sunssión, donde en aquel tiempo vivian los susodichos Caríos.
De ahi navegamos aguas arriba y encontramos á cada 5 millas (leguas) de camino un pueblo de los dichos Caríos, asentados sobre el agua (rio) Peroboe; [estos] nos trajeron á los Cristianos lo necesario y comida de pescado y carne, gallinas, gansos, ovejas de los Indios [y] avestruces. Mas cuando al fin llegamos al pueblo de los Caríos que se llama Weybingon (Guayviaño) que cae á 80 millas (leguas) de la ciudad Nostra Singnora de Sunsión, allí tomamos nosotros de estos Caríos comida y todo lo demás que nos hacia falta y de ellos pudimos conseguir.