Viaje al Río de la Plata

Eyollas de suerte que ni uno de ellos escapó. Dios se apiade de ellos y de todos nosotros y nos tenga misericordia.

CAPÍTULO XXVI

Ahora [pues] nosotros los 50 hombres, eso que fuimos al asiento Nostra Singnora de Sunsión y allí esperábamos á Jann Eyollas, el capitán, y á nuestros soldados, supimos como les había ido por , que era esclavo del finado Jann Eyollas y que él había traído de los Payse[n]os; este gracias á su lengua había escapado, nos contó todo de principio á fin como había sucedido; sin embargo no nos fué posible creerle. Y durante el año que per-

Volver al Índice

Mantenido por hdlabconicet

2025 Viaje al Río de la Plata. ISSN 1668-0001. CC BY 4.0