CAPÍTULO XLI
DISCORDIA ENTRE LOS CRISTIANOS. ALZAMIENTO DE LOS CARÍOS. YAPIRÚS Y BATATÁES AYUDAN Á LOS ESPAÑOLES.
Y cuando ya lo habían despachado á Aluiso Capessa de Bacha á Hispaniam nosotros mismos los Cristianos entramos en tal discordia que ya no podíamos avenirnos, uno con otro nos peleábamos día y noche, de suerte que parecía como si el mismo diablo metido entre nosotros nos mandaba, y nadie se creía seguro con los demás. La tal guerra entre nosotros mismo duró dos años largos por causa de Aluiso Capessa de Bacha; y cuando en este estado de cosas vieron los Caríos, nuestros amigos de marras, que nosotros los mismos Cristianos andábamos desunidos, y cómo nos traicionábamos y dividíamos, no quedaron con muy buena idea de nosotros, sino que se sacaron la cuenta que todo reino que está dividido y se desune tiene que perderse. Por esto entre ellos se arreglaron y convinieron é hicieron reunión al objeto de matarnos á los Cristianos y arrojarnos de la tierra. Mas Dios, el Todopoderoso, ¡loado sea siempre y eternamente! no condescendió con estos Caríos hasta dejar-