Pa sa das es tas is las de Cas ti llos
a de lan te es tán dos al go ma yo res
de los Lo bos se di cen que lo bi llos
co mo be ce rros hay po co me no res
un po co más a rri ba dos is li llos
es tán nom bra dos is las de las Flo res
y ha bien do trein ta le guas ca mi na do
al puer to San Ga briel he mos lle ga do
Sie te is las hay en él al tas gra cio sas
un po co de la tie rra des via das
de pal mas y lau re les muy co pio sas
es tán a ques tas is las bien po bla das
A quí lle gan las na ves po de ro sas
co mo sa len de Es pa ña des pa cha das
Fron te ro es Bue nos Ai res ya po bla do
y del sur im por tu no res guar da do
De an cho nue ve le guas o más tie ne
el rí o por a quí y muy hon da ble
La na ve has ta a quí se gu ra vie ne
que co mo el an cho mar es na ve ga ble
pa sa do es te pa ra je le con vie ne
al pi lo to mi rar el go ber na ble
en la ma no lle van do siem pre son da
o se guir la ca nal que va bien hon da
Pasadas estas islas de Castillos,
adelante están dos algo mayores:
de los Lobos se dicen, que lobillos
como becerros hay poco menores;
un poco más arriba dos islillos
están, nombrados islas de las Flores,
y habiendo treinta leguas caminado,
al puerto San Gabriel hemos llegado.
Siete islas hay en él, altas, graciosas,
un poco de la tierra desviadas,
de palmas y laureles muy copiosas,
están aquestas islas bien pobladas.
Aquí llegan las naves poderosas,
como salen de España despachadas.
Frontero es Buenos Aires ya poblado,
y del sur importuno resguardado.
De ancho nueve leguas o más tiene
el río por aquí, y muy hondable.
La nave hasta aquí segura viene,
que como el ancho mar es navegable,
pasado este paraje le conviene
al piloto mirar el gobernable,
en la mano llevando siempre sonda,
o seguir la canal que va bien honda.
Pasadas estas islas de Castillos,
Adelante estan dos algo mayores:
De los Lobos se dicen, que lobillos
Como becerros hay, poco menores.
Un poco mas arriba dos islillos
Estan, nombrados islas de las Flores,
Y habiendo treinta leguas caminado,
Al puerto San Gabriel hemos llegado.
Siete islas hay en él, altas, graciosas,
Un poco de la tierra desviadas,
De palmas y laureles muy copiosas,
Estan aquestas islas bien pobladas.
Aquí llegan las naves poderosas,
Como salen de España despachadas.
Frontero es Buenos Aires ya poblado,
Y del sur importuno resguardado.
De ancho nueve leguas ó mas tiene
El rio por aquí, y muy hondable.
La nave hasta aquí segura viene:
Que como el ancho mar es navegable,
Pasado este parage le conviene
Al piloto mirar el gobernable,
En la mano llevando siempre sonda,
O seguir la canal que va bien honda.