Es rí o de cau dal y po de ro so
su bo ca le gua y me dia ca si tie ne
En tra en es te pa ra je muy fu rio so
que de pe ñas y ris cos al tos vie ne
En él en tra o tro rí o con re po so
que al pa re cer en tran do se de tie ne
al cual San Sal va dor lla mó Ga bo to
an tes que de los in dios fue se ro to
A dos le guas en tra o tro que es nom bra do
el Rí o Ne gro que Hum te ní a por nom bre
A quí en nues tro tiem po se han ha lla do
pes ca dos se me jan tes mu chos al hom bre
a ques to de pa sa da lo he to ca do
nin gu no de le er lo a quí se a som bre
que sien do Dios ser vi do en o tro can to
di ré co sas de vis ta y más es pan to
De je mos es te rí o que co rrien do
de a llá ha cia el Bra sil vie ne de re cho
y en él se vie nen o tros mil me tien do
que le tie nen fa mo so y gran de he cho
Al nues tro de la Pla ta re vol vien do
des de a quí él co mien za a ser des he cho
y en on ce bra zas gran des se re par te
ti ran do ca da cual su lar ga par te
Es río de caudal y poderoso,
su boca legua y media casi tiene.
Entra en este paraje muy furioso,
que de peñas y riscos altos viene.
En él entra otro río con reposo,
que al parecer entrando se detiene,
al cual San Salvador llamó Gaboto,
antes que de los indios fuese roto.
A dos leguas entra otro, que es nombrado
el Río Negro, que Hum tenía por nombre.
Aquí en nuestro tiempo se han hallado
pescados semejantes muchos al hombre,
aquesto de pasada lo he tocado,
ninguno de leerlo aquí se asombre,
que, siendo Dios servido, en otro canto
diré cosas de vista y más espanto.
Dejemos este río, que corriendo
de allá hacia el Brasil viene derecho,
y en él se vienen otros mil metiendo,
que le tienen famoso y grande hecho.
Al nuestro de la Plata revolviendo,
desde aquí él comienza a ser deshecho,
y en once brazas grandes se reparte,
tirando cada cual su larga parte.
Es rio de caudal y poderoso,
Su boca legua y media casi tiene.
Entra en este parage muy furioso,
Que de peñas y riscos altos viene.
En él entra otro rio con reposo,
Que al parecer entrando se detiene;
Al cual San Salvador llamó ,
Antes que de los indios fuese roto.
A dos leguas entra otro, que es nombrado
El Rio Negro, que _Hum_ tenia por nombre.
Aquí en nuestros tiempos se han hallado
Pescados semejantes mucho al hombre.
Aquesto de pasada lo he tocado,
Ninguno de léerlo aquí se asombre,
Que, siendo Dios servido, en otro canto
Diré cosas de vista y mas espanto.
Dejemos este rio, que corriendo
De allá hácia el Brasil viene derecho;
Y en él se vienen otros mil metiendo,
Que le tienen famoso y grande hecho.
Al nuestro de la Plata revolviendo,
Desde aquí él comienza a ser deshecho,
Y en once brazas grandes se reparte,
Tirando cada cual su larga parte.