De a po co pre ce dien do ex co mu nio nes
el Cá ce res ha si do des cu bier to
y pues to en un na ví o con pri sio nes
pa ra Cas ti lla sa le de a quel puer to
De en fer me dad con go jas y pa sio nes
fray Pe dro de la To rre ha si do muer to
de jan do gran de fa ma en San Vi cen te
de gran de re li gio so y con ti nen te
Muy pú bli co en la cos ta se de cí a
que al tiem po que mu rió a ques te pre la do
la pie za y a po sen to mu cho o lí a
y el se pul cro do fue ra se pul ta do
A quel que en la mor ta ja le en vol ví a
con ju ra men to lo ha tes ti fi ca do
y a sí lo di cen hoy los lu si ta nos
que muer to bien le o lí an pies y ma nos
Ya Juan Or tiz de Zá ra te es tá dan do
gran prie sa y que me a cuer de que ha par ti do
me di ce y que ya vie ne na ve gan do
que cum pla lo que ten go pro me ti do
De só lo me a cor dar ya es tá tem blan do
la ma no que en pen sar que he pa de ci do
ca la mi dad tan gran de y tal mi se ria
te mor ten go de ver me en o tra fe ria
De a poco precediendo excomuniones,
el Cáceres ha sido descubierto,
y puesto en un navío con prisiones
para Castilla sale de aquel puerto.
De enfermedad, congojas y pasiones
fray Pedro de la Torre ha sido muerto,
dejando grande fama en San Vicente
de grande religioso y continente.
Muy público en la costa se decía
que al tiempo que murió aqueste prelado
la pieza y aposento mucho olía,
y el sepulcro do fuera sepultado.
Aquel que en la mortaja le envolvía
con juramento lo ha testificado,
y así lo dicen hoy los lusitanos,
que muerto bien le olían pies y manos.
Ya Juan Ortiz de Zárate está dando
gran priesa, y que me acuerde que ha partido
me dice, y que ya viene navegando,
que cumpla lo que tengo prometido.
De sólo me acordar ya está temblando
la mano, que en pensar que he padecido
calamidad tan grande y tal miseria,
temor tengo de verme en otra feria.
De a poco, precediendo excomuniones,
El ha sido descubierto,
Y puesto en un navio con prisiones,
Para Castilla sale de aquel puerto.
De enfermedad, congojas y pasiones,
ha sido muerto,
Dejando grande fama en San Vicente,
De grande religioso y continente.
Muy publico en la costa se decia,
Que al tiempo que murió aqueste prelado
La pieza y aposento mucho olia,
Y el sepulcro dó fuera sepultado.
Aquel que en la mortaja le envolvia,
Conjuramento lo ha testificado,
Y así lo dicen hoy los lusitanos,
Que muerto, bien le olian pies y manos.
Ya está dando
Gran priesa, y que me acuerde que ha partido,
Me dice, y que ya viene navegando;
Que cumpla lo que tengo prometido.
De solo me acordar ya está temblando
La mano; que en pensar que he padecido
Calamidad tan grande y tal miseria,
Temor tengo de verme en otra feria.