Argentina y Conquista del Río de la Plata

con otros acaecimientos de los reinos del Perú, Tucumán y el Estado del Brasil

Ha bien do pues ya Fe bo ca mi na do

su cur so en re don dez de la ce re a

mos tra ba el ros tro ro jo y co lo ra do

cu brien do la mon ta ña de li bre a

Él sin ven tu ra a man te fa ti ga do

el ca mi no bus ca ba mas pe le a

en va no que no a cier ta con ca mi no

que el mie do y el te mor le qui ta el ti no

Sa lie ron los dos jun tos a la pla ya

pen san do que sa lie ran al po bla do

la da ma sin ven tu ra se des ma ya

en ver mo se ha an a le ja do

al ga lán le a mo nes ta e lla que va ya

en bus ca de ca mi no y que ha lla do

se vuel va a a quel lu gar él ha par ti do

mas pres to él sin ven tu ra an da per di do

Que por es ta cau sa a llí la da ma

de do lor y con go ja y pe na lle na

do la si guien te no che tu vo ca ma

tris te so la llo ro sa en el a re na

El po bre por el bos que gri ta y cla ma

al ai re pu bli can do su gran pe na

que por bus car ca mi no sen da y a

sin su da ma se ve y sin a le grí a

Habiendo pues ya Febo caminado

su curso en redondez de la cerea,

mostraba el rostro rojo y colorado,

cubriendo la montaña de librea.

Él, sin ventura amante fatigado,

el camino buscaba, mas pelea

en vano, que no acierta con camino,

que el miedo y el temor le quita el tino.

Salieron los dos juntos a la playa

pensando que salieran al poblado,

la dama sin ventura se desmaya

en ver cómo se habían alejado;

al galán le amonesta ella que vaya

en busca de camino, y que hallado

se vuelva a aquel lugar; él ha partido,

mas presto él sin ventura anda perdido.

Quedó por esta causa allí la dama

de dolor y congoja y pena llena,

do la siguiente noche tuvo cama,

triste, sola, llorosa en el arena.

El pobre por el bosque grita y clama,

al aire publicando su gran pena,

que por buscar camino, senda y vía,

sin su dama se ve, y sin alegría.

Habiendo pues ya caminado

Su curso en redondez, de la cerea,

Mostraba el rostro rojo y colorado,

Cubriendo la montaña de librea.

El sin ventura amante fatigado,

El camino buscaba, mas pelea

En vano; que no acierta con camino,

Que el miedo y el temor le quita el tino.

Salieron los dos juntos a la playa,

Pensando que salieran al poblado:

La dama sin ventura se desmaya,

En ver como se habian alejado;

Al galan le amonesta ella que vaya

En busca de camino, y que hallado

Se vuelva a aquel lugar: él ha partido,

Mas presto el sin ventura anda perdido.

Quedó por esta causa allí la dama

De dolor, y congoja y pena llena,

Dó la siguiente noche tuvo cama,

Triste, sola, llorosa en el arena.

El pobre por el bosque grita y clama,

Al aire publicando su gran pena;

Que por buscar camino, senda y via

Sin su dama se vé, y sin alegria.

Volver al Índice

Mantenido por hdlabconicet

2024 Argentina y Conquista del Río de la Plata. ISSN 1668-0001. CC BY 4.0