La pren da de es te tris te ya per di da
y abs ci sa de su ros tro ha re co bra do
y en pren da mu chas ve ces de co mi da
a gen tes en la is la la ha em pe ña do
y a par tar se del plei to que pe di da
te ní a su jus ti cia el des di cha do
en true co de que el re o a llí le die se
al gún ma íz o ra í ces que co mie se
Las da mas que hi cie ron es te a le ve
ha cién do se jus ti cia sin jus ti cia
e ran de ba jo ser que bien se de be
a ques to pre su mir de su ma li cia
Nin gu na de va lor a tal se a tre ve
aun que es de las mu je res sin jus ti cia
in gra ti tud mal dad lá gri mas llo ro
men ti ras y ven gan zas su te so ro
Pre gun ten a A ris tó te les qué sen tí a
de la mu jer Pues di ce en su es cri tu ra
a lá gri mas y llan to en de ma sí a
in cli na da bien es de su na tu ra
en vi dia y que ri mo nia la se guí a
flo je dad y pe re za y de trac tu ra
Mas di ce de e lla un bien que se con ten ta
con muy po co man jar y se sus ten ta
La prenda de este triste ya perdida
y abscisa de su rostro ha recobrado,
y en prenda muchas veces de comida
a gentes en la isla la ha empeñado;
y apartarse del pleito que pedida
tenía su justicia el desdichado,
en trueco de que el reo allí le diese
algún maíz o raíces que comiese.
Las damas que hicieron este aleve,
haciéndose justicia sin justicia,
eran de bajo ser, que bien se debe
aquesto presumir de su malicia.
Ninguna de valor a tal se atreve,
aunque es de las mujeres sin justicia,
ingratitud, maldad, lágrimas, lloro,
mentiras y venganzas su tesoro.
Pregunten a Aristóteles qué sentía
de la mujer. Pues dice en su escritura,
a lágrimas y llanto en demasía
inclinada bien es de su natura;
envidia y querimonia la seguía,
flojedad y pereza y detractura.
Mas dice de ella un bien, que se contenta
con muy poco manjar y se sustenta.
La prenda de este triste ya perdida,
Y abscisa de su rostro ha recobrado,
Y en prenda muchas veces de comida,
A gentes en la isla la ha empeñado;
Y apartase del pleito que pedida
Tenia su justicia el desdichado,
En trueco de que el reo allí le diese
Algun maiz ó raices que comiese.
Las damas que hicieron este aleve,
Haciendose justicia sin justicia,
Eran de bajo ser; que bien se debe
Aquesto presumir de su malicia.
Ninguna de valor a tal se atreve,
Aunque es de las mugeres sin justicia,
Ingratitud, maldad, lágrimas, lloro,
Mentiras, y venganzas su tesoro.
Pregunten a qué sentia
De la muger? Pues dice en su escritura,
A lágrimas, y llanto en demasía,
Inclinada bien es de su natura,
Envidia y querimonia la seguia,
Flojedad, y pereza y detractura:
Mas dice de ella un bien; que se contenta
Con muy poco manjar y se sustenta.