Es ta ban con go jo sos es pe ran do
que vuel van los na ví os al con cier to
ya vie ne Mel ga re jo na ve gan do
de jan do la más gen te a llá en el puer to
El buen Ca pi tán en tra pre go nan do
que el pe rro Za pi cán que da ba muer to
y que i ba ya hu yen do de co rri da
su e jér ci to y su gen te de ven ci da
Con pla cer le re ci ben de a le grí a
y to dos con la nue va se a le gra ron
el ro to cam po y gen te ar ti lle rí a
en la za bra y ba je les em bar ca ron
La za bra el U ru guay en tra do ha bí a
el cual los pi lo tos no a cer ta ron
ni bas ta i zar trin que te ni el an te na
que fuer te men te en ca lla en el a re na
Los ber gan ti nes su ben pres ta men te
a des car gar el ha to que lle va ban
el Gua ra ní a cu die ra di li gen te
a ver que los cris tia nos es pe ra ban
Re ci bi dos de paz y pres ta men te
los in dios a su ca sa se tor na ban
y en bre ve a dos cris tia nos han tra í do
y que o tros dos tra e rán han pro me ti do
Estaban congojosos, esperando
que vuelvan los navíos al concierto,
ya viene Melgarejo navegando,
dejando la más gente allá en el puerto.
El buen Capitán entra pregonando
que el perro Zapicán quedaba muerto,
y que iba ya huyendo de corrida
su ejército y su gente de vencida.
Con placer le reciben de alegría,
y todos con la nueva se alegraron,
el roto campo y gente, artillería,
en la zabra y bajeles embarcaron.
La zabra el Uruguay entrado había,
el cual los pilotos no acertaron;
ni basta izar trinquete, ni el antena,
que fuertemente encalla en el arena.
Los bergantines suben prestamente
a descargar el hato que llevaban,
el Guaraní acudiera diligente
a ver que los cristianos esperaban.
Recibidos de paz, y prestamente
los indios a su casa se tornaban,
y en breve a dos cristianos han traído,
y que otros dos traerán han prometido.
Estaban congojosos, esperando
Que vuelvan los navios al concierto:
Ya viene navegando,
Dejando la mas gente alla en el puerto.
El buen entra pregonando,
Que el perro quedaba muerto,
Y que iba ya huyendo de corrida,
Su ejercito y su gente de vencida.
Con placer le reciben de alegria,
Y todos con la nueva se alegraron,
El roto campo y gente, artillería,
En la zabra y bajeles embarcaron.
La zabra el Uruguay entrado habia,
El canal los pilotos no acertaron:
Ni basta izar trinquete, ni el antena,
Que fuertemente encalla en el arena.
Los bergantines suben prestamente
A descargar el hato que llevaban,
El acudiera diligente
A ver que los cristianos esperaban.
Recibidos de paz, y prestamente
Los indios a su casa se tornaban;
Y en breve a dos cristianos han traido,
Y que otros dos traerán han prometido.