Los in ge nios los mue len muy a í na
por muy gra cio sa tra za y ar ti fi cio
y he cho ya el me tal cual pu ra ha ri na
se ha ce con a zo gue el be ne fi cio
En bre ve sa le pi ña y pla ta fi na
y mu chas ve ces ha ce bien su o fi cio
el a zo gue que dan do tan en te ro
se gún y co mo es ta ba de pri me ro
El gran de la be rin to que de Cre ta
es te di cho con ra zón pue de lla mar se
el ce rro Po to sí a do u na ve ta
a mu chos en ri que ce y en ga ñar se
a o tro fuer za tan to que se me ta
en e lla has ta vi vo se pul tar se
que dan do so la tie rra se pul ta do
a vuel tas de la pla ta que ha bus ca do
Es tan do a quí el Vi rrey don Die go vie ne
al a sien to lla ma do de To mi na
a do un co rre gi dor que el pue blo tie ne
al pun to que lo ve con él ca mi na
pren dién do le que quie re que se sue ne
que él mis mo a le pren der se de ter mi na
A Po to sí lo lle va di li gen te
y el po bre de don Die go va do lien te
Los ingenios los muelen muy aína
por muy graciosa traza y artificio,
y hecho ya el metal cual pura harina,
se hace con azogue el beneficio.
En breve sale piña y plata fina,
y muchas veces hace bien su oficio
el azogue, quedando tan entero
según y como estaba de primero.
El grande laberinto, que de Creta
este dicho, con razón puede llamarse
el cerro Potosí, a do una veta
a muchos enriquece; y engañarse
a otro fuerza tanto, que se meta
en ella hasta vivo sepultarse,
quedando so la tierra sepultado
a vueltas de la plata que ha buscado.
Estando aquí el Virrey, don Diego viene
al asiento llamado de Tomina,
a do un corregidor, que el pueblo tiene,
al punto que lo ve con él camina,
prendiéndole, que quiere que se suene
que él mismo a le prender se determina.
A Potosí lo lleva diligente,
y el pobre de don Diego va doliente.
Los ingenios los muelen muy aina,
Por muy graciosa traza y artificio;
Y hecho ya el metal cual pura harina,
Se hace con azogue el beneficio.
En breve sale piña y plata fina,
Y muchas veces hace bien su oficio
El azogue, quedando tan entero
Segun y como estaba de primero.
El grande laberinto, que de Creta
Es dicho, con razon puede llamarse
El cerro Potosí, a dó una veta
A muchos enriquece; y engañarse
A otro fuerza tanto, que te meta
En ella hasta vivo sepultarse;
Quedando so la tierra sepultado
A vueltas de la plata que ha buscado.
Estando aqui el , viene
Al asiento llamado de Tomina,
A dó un , que el pueblo tiene,
Al punto que lo ve con el camina,
Prendiendole, que quiere que se suene
Que el mismo a le prender se determina:
A Potosi lo lleva diligente,
Y el pobre de va doliente.