Argentina y Conquista del Río de la Plata

con otros acaecimientos de los reinos del Perú, Tucumán y el Estado del Brasil

Pe ro a quel que no sa be ni es cier to

mas an tes con ra zón muy te me ro so

lo que ha de ser de sí des pués de muer to

con la vi da se ha lla muy go zo so

A lo ex pe ri men ta quien con cier to

no tie ne en su vi vien da el vir tuo so

no hu ye de la muer te cuan do en tien de

que en e lla ha lla lo que pre ten de

Pre gun ten a los már ti res glo rio sos

de los fal sos ti ra nos a fli gi dos

se i ban a la muer te muy go zo sos

en ver se por Je sús ser per se gui dos

No es ta ban de su pre mio re ce lo sos

mas con fir me es pe ran za guar ne ci dos

cre í an les es ta ba a pa re ja da

la co ro na de glo ria con su ma da

És ta hi zo al pas tor aun que pri me ro

por di vi no se cre to fue li bra do

de la cár cel que es co mo cor de ro

hu mil de a a quel ne ni co man da do

La mis ma a su que ri do com pa ñe ro

le con vi da a que se a de go lla do

y co mo a en su vi da e llos se a ma ron

en la muer te tam po co se a par ta ron

Pero, aquel que no sabe ni está cierto,

mas antes con razón muy temeroso

lo que ha de ser de sí después de muerto,

con la vida se halla muy gozoso.

Así lo experimenta quien concierto

no tiene en su vivienda; el virtuoso

no huye de la muerte, cuando entiende

que en ella hallará lo que pretende.

Pregunten a los mártires gloriosos

de los falsos tiranos afligidos,

se iban a la muerte muy gozosos

en verse por Jesús ser perseguidos.

No estaban de su premio recelosos,

mas con firme esperanza guarnecidos

creían les estaba aparejada

la corona de gloria consumada.

Ésta hizo al pastor, aunque primero

por divino secreto fue librado

de la cárcel, que esté como cordero

humilde a aquel nerónico mandado.

La misma a su querido compañero

le convida a que sea degollado,

y como acá en su vida ellos se amaron,

en la muerte tampoco se apartaron.

Pero, aquel que no sabe ni está cierto,

Mas antes con razon muy temeroso

Lo que ha de ser de si despues de muerto,

Con la vida se halla muy gozoso.

Así lo experimenta quien concierto

No tiene en su vivienda: el virtuoso

No huye de la muerte, cuando entiende

Que en ella hallara lo que pretende.

Pregunten a los Martires gloriosos

De los falsos tiranos afligidos,

Si iban a la muerte muy gozosos

En verse por Jesus ser perseguidos.

No estaban de su prémio recelosos,

Mas con firme esperanza guarnecidos,

Creian les estaba aparejada

La corona de gloria consumada.

Esta hizo al pastor, aunque primero

Por divino secreto fué librado

De la carcel, que esté como cordero

Humilde a aquel nerónico mandado:

La misma a su querido compañero

Le convida a que sea degollado;

Y como acá en su vida ellos se amaron

En la muerte tampoco se apartaron.

Volver al Índice

Mantenido por hdlabconicet

2024 Argentina y Conquista del Río de la Plata. ISSN 1668-0001. CC BY 4.0