Argentina y Conquista del Río de la Plata

con otros acaecimientos de los reinos del Perú, Tucumán y el Estado del Brasil

Canto vigésimo

Cuéntase en este canto cómo un indio llamado Obera se intitulaba hijo de Dios, y a un hijo suyo Papa, y a otro Emperador; y cómo Garay entró en los Nuaras, y de vuelta rompió la palizada de Yaguatatí.

El a be ja con vier te co mo ve mos

las flo res en la miel dul ce y sa bro sa

del a ra ña y la bo ra le e mos

que en pon zo ña las vuel ve pon zo ño sa

En nues tra san ta fe bien co no ce mos

que pa sa des ta suer te a ques ta co sa

pues el he re je y ma lo de las flo res

del Es cri tu ra tor na en sus e rro res

El abeja convierte, como vemos,

las flores en la miel dulce y sabrosa;

del araña y la víbora leemos

que en ponzoña las vuelve ponzoñosa.

En nuestra santa fe bien conocemos

que pasa desta suerte aquesta cosa;

pues el hereje y malo, de las flores

del Escritura torna en sus errores.

Dejemos esto ahora, y revolvamos

A , que se siente con pujanza:

Y porque por extenso lo digamos,

Hagamos aquí fin de aquesta estanza.

Y mas que en la siguiente recontamos

Del furioso arcabuz y de la lanza,

Conviene cosas nuevas y de espanto

Comenzar a contar en nuevo canto.

CANTO VIGESIMO.

Cuéntase en este canto

como un indio llamado

se intitulaba hijo de Dios, y a un hijo suyo,

Papa, y a otro Emperador; y como

entró en los Nuaras, y de

vuelta rompio la palizada

de

.

El abeja convierte, como vemos,

Las flores en la miel dulce y sabrosa,

Del araña y la vibora leemos,

Que en ponzoña las vuelve ponzoñosa.

En nuestra santa fé bien conocemos

Que pasa desta suerte aquesta cosa;

Pues el hereje y malo, de las flores

Del Escritura torna en sus errores.

Volver al Índice

Mantenido por hdlabconicet

2024 Argentina y Conquista del Río de la Plata. ISSN 1668-0001. CC BY 4.0