Cu re mo a llí sa lió di si mu lan do
el ju ra men to he cho que te ní a
Ga ray se lle ga a prie sa ca mi nan do
con gran es truen do gri ta y vo ce rí a
Los in dios que le es ta ban es pe ran do
ven ci dos de te mor y co bar dí a
tras la chus ma se fue ron mas Cu re mo
mos tra do ha su va lor por gran ex tre mo
Al es pa ñol es pe ra y con gran brí o
le di ce que no pa re en es te a sien to
que vein te le guas más hay gran gen tí o
do sa tis fa cer pue de bien su in ten to
Pa sa do el Ya gua rí fa mo so rí o
los sol da dos i rán con gran con ten to
y a vein te le guas po co más o me nos
los cam pos ha lla rán de gen te lle nos
Cu re mo que es to di ce les o fre ce
la guí a que les guí e bien de re cho
su con se jo to mar bien les pa re ce
sin tien do que ven drá de e llo pro ve cho
El in dio se re ti ra que a no che ce
y vuel ve a la ma ña na con des pe cho
por que al al ma le lle ga a es te pa ga no
de ver nues tro re al en a quel lla no
Curemo allí salió disimulando
el juramento hecho que tenía.
Garay se llega a priesa caminando
con gran estruendo, grita y vocería.
Los indios, que le estaban esperando,
vencidos de temor y cobardía,
tras la chusma se fueron, mas Curemo
mostrado ha su valor por gran extremo.
Al español espera, y con gran brío
le dice que no pare en este asiento,
que veinte leguas más hay gran gentío
do satisfacer puede bien su intento.
Pasado el Yaguarí, famoso río,
los soldados irán con gran contento,
y a veinte leguas, poco más o menos,
los campos hallarán de gente llenos.
Curemo, que esto dice, les ofrece
la guía que les guíe bien derecho;
su consejo tomar bien les parece,
sintiendo que vendrá de ello provecho.
El indio se retira, que anochece,
y vuelve a la mañana con despecho,
porque al alma le llega a este pagano
de ver nuestro real en aquel llano.
allí salió disimulando
El juramento hecho que tenia:
se llega a priesa, caminando
Con gran estruendo, grita y vocería.
Los indios que le estaban esperando,
Vencidos de temor y cobardía,
Tras la chusma se fueron, mas
Mostrado ha su valor por gran estremo.
Al español espera, y con gran brio
Le dice, que no pare en este asiento;
Que veinte leguas mas, hay gran gentío
Dó satisfacer puede bien su intento.
Pasado el Yaguarí, famoso rio,
Los soldados irán con gran contento,
Y a veinte leguas, poco mas ó menos,
Los campos hallarán de gente llenos.
, que esto dice, les ofrece
La guia, que les guie bien derecho;
Su concejo tomar bien les parece,
Sintiendo que vendrá de ello provecho.
El indio se retira, que anochece,
Y vuelve a la mañana con despecho,
Porque al alma le llega a este pagano
De ver nuestro real en aquel llano.