Argentina y Conquista del Río de la Plata

con otros acaecimientos de los reinos del Perú, Tucumán y el Estado del Brasil

Ser vi cio al gran Vi rrey di cen ha re mos

en pren der a Ga ray ma lo y tra vie so

y li bres des te ca so que da re mos

si al Vi rrey le en via mos pres to pre so

Del ca so a Tu cu mán a vi sa re mos

que no pue de ve nir nos mal su ce so

A Vi llal ta y Ruiz por men sa je ros

al A bre go des pa chan muy li ge ros

Por dos ve ces o tres se han car te a do

y en bre ve se ha for ja do la ma ra ña

Lo que A bre go con e llos ha tra ta do

no sé de cir que u siem pre de ma ña

U na no che con car tas han lle ga do

y al pun to con ti ra na y cru da sa ña

per die ron al Te nien te y a O li ve ra

Al cal de y a un so bri no del buen Ve ra

En ca sa de Ve nial vo se jun ta ron

con co tas ar ca bu ces mo rrio nes

a la gen te ple be ya con vo ca ron

con sus fin gi das cau sas y ra zo nes

Su mal di to de sig no con fir ma ron

ven ci dos de li via nas pre ten sio nes

su mu jer al de Lei va le de a

que su pes cue zo a es par to ya le o a

"Servicio al gran Virrey", dicen, "haremos

en prender a Garay malo y travieso,

y libres deste caso quedaremos,

si al Virrey le enviamos presto preso.

Del caso a Tucumán avisaremos,

que no puede venirnos mal suceso".

A Villalta y Ruiz por mensajeros

al Abrego despachan muy ligeros.

Por dos veces o tres se han carteado,

y en breve se ha forjado la maraña.

Lo que Abrego con ellos ha tratado

no sé decir, que usó siempre de maña.

Una noche con cartas han llegado,

y al punto con tirana y cruda saña

perdieron al Teniente, y a Olivera,

Alcalde, y a un sobrino del buen Vera.

En casa de Venialvo se juntaron

con cotas, arcabuces, morriones;

a la gente plebeya convocaron

con sus fingidas causas y razones.

Su maldito designo confirmaron,

vencidos de livianas pretensiones;

su mujer al de Leiva le decía

que su pescuezo a esparto ya le olía.

Servicio al gran Virrey, dicen, haremos

En prender a malo y travieso,

Y libres deste caso quedaremos,

Si al Virrey le enviamos presto preso.

Del caso a Tucuman avisaremos,

Que no puede venirnos mal suceso:

A y por mensageros

Al despachan muy ligeros.

Por dos veces o tres se han carteado,

Y en breve se ha forjado la maraña:

Lo que con ellos ha tratado

No sé decir, que uso siempre de maña.

Una noche con cartas han llegado,

Y al punto con tirana y cruda saña

Prendieron al teniente, y a

Alcalde, y a un sobrino del buen .

En casa de se juntaron

Con cotas, arcabuces, morriones:

A la gente plebeya convocaron,

Con sus fingidas causas y razones.

Su maldito designo confirmaron,

Vencidos de livianas pretensiones,

Su muger al de le decia,

Que su pescuezo a esparto ya le olia.

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2024 Argentina y Conquista del Río de la Plata. ISSN 1668-0001. CC BY 4.0