Al gu nos más man ce bos pre sos fue ron
que en a ques te mo tín fue ron cul pa dos
pro ce sos con tra to dos se hi cie ron
mas fue ron so bre pei ne ful mi na dos
Mos que ra y el Vi llal ta que hu ye ron
a San tia go en mal pun to ya lle ga dos
de su tris te de sas tre die ron nue va
y a Ler ma de su in ten to die ron prue ba
El li cen cia do Ler ma en es te pun to
en tra ba a go ber nar en San tia go
Su ve ni da no sa ben y es tá jun to
con su gen te ha cien do gran de es tra go
De a mi gos y fa vor es tá dis jun to
el A bre go en a ques te fuer te tra go
y el Ler ma pre ten dí a a sí co ger le
por que in ten ción tra í a de pren der le
En el Pe rú la fa ma ha bí a vo la do
con fal sa pre sump ción o ver da de ra
que a ques te A bre go es ta ba me dio al za do
por tan to vie ne Ler ma a la li ge ra
To mo le de im pro vi so y des cui da do
que no sé de o tra suer te lo que fue ra
en ví a seis sol da dos con su her ma no
An to nio Mi ra bal el se vi lla no
Algunos más mancebos presos fueron
que en aqueste motín fueron culpados;
procesos contra todos se hicieron,
mas fueron sobre peine fulminados.
Mosquera y el Villalta, que huyeron
a Santiago, en mal punto ya llegados,
de su triste desastre dieron nueva,
y a Lerma de su intento dieron prueba.
El licenciado Lerma en este punto
entraba a gobernar en Santiago.
Su venida no saben, y está junto
con su gente haciendo grande estrago.
De amigos y favor está disjunto
el Abrego en aqueste fuerte trago,
y el Lerma pretendía así cogerle,
porque intención traía de prenderle.
En el Perú la fama había volado,
con falsa presumpción, o verdadera,
que aqueste Abrego estaba medio alzado,
por tanto viene Lerma a la ligera.
Tomole de improviso y descuidado,
que no sé de otra suerte lo que fuera;
envía seis soldados con su hermano
Antonio Mirabal, el sevillano.
Algunos mas mancebos presos fueron
Que en aqueste motin fueron culpados;
Procesos contra todos se hicieron,
Mas fueron sobre peine fulminados.
, y el , que huyeron
A Santiago, en mal punto ya llegados,
De su triste desastre dieron nueva,
Y a de su intento dieron prueba.
El Licenciado en este punto
Entraba a gobernar en Santiago.
Su venida no saben, y está junto
Con su gente haciendo grande estrago.
De amigos, y favor está disjunto
El en aqueste fuerte trago,
Y el pretendía así cojerle
Porque intencion traía de prenderle.
En el Perú la fama habia volado,
Con falsa presumpcion, ó verdadera,
Que aqueste estaba medio alzado;
Por tanto viene a la ligera.
Tomóle de improviso y descuidado,
Que no sé de otra suerte lo que fuera;
Envia seis soldados con su hermano
, el sevillano.