En bre ve co men za ron de tra bar se
con chis mes y o tras mu chas ni ñe rí as
el De án de se a ba se ña lar se
con gran de pre sump ción y bo be rí as
Mas no le de ja Ler ma a ven ta jar se
No es jus to que su fra mos de ma sí as
le di ce Pa dre ten ga su fri mien to
no ha ga sal ga el hom bre de su tien to
Y lue go di ce Mues tre los re ca dos
que tie ne por do fir ma Li cen cia do
y de De án tam bién pues pre ben da dos
nom brar só lo a sí el Rey se lo ha de ja do
Es tan do so bre a qués tos muy tra ba dos
la co sa a tal ex tre mo hu bo lle ga do
que por fuer za el De án se de ter mi na
par tir pa ra el Pe rú y ya ca mi na
A Es te co se par tió con gran e no jo
que a su par tir la fuer za le o bli ga ba
el ba chi ller Gar cí a die ra un o jo
en true co por no ver lo que pa sa ba
La bar ba co mo di cen en re mo jo
e chó por ver la de o tro se que ma ba
con el De án se va por que te mí a
que lo pro pio se rá de él o tro dí a
En breve comenzaron de trabarse
con chismes, y otras muchas niñerías;
el Deán deseaba señalarse
con grande presumpción y boberías.
Mas no le deja Lerma aventajarse:
"No es justo que suframos demasías",
le dice, "Padre, tenga sufrimiento,
no haga salga el hombre de su tiento".
Y luego dice: "Muestre los recados
que tiene por do firma Licenciado,
y de Deán también, pues prebendados
nombrar sólo a sí el Rey se lo ha dejado".
Estando sobre aquéstos muy trabados,
la cosa a tal extremo hubo llegado
que por fuerza el Deán se determina
partir para el Perú, y ya camina.
A Esteco se partió con gran enojo,
que a su partir la fuerza le obligaba;
el bachiller García diera un ojo
en trueco por no ver lo que pasaba.
La barba, como dicen, en remojo
echó, por ver la de otro se quemaba;
con el Deán se va, porque temía
que lo propio será de él otro día.
En breve comenzaron de trabarse
Con chismes, y otras muchas niñerias;
El deseaba señalarse
Con grande presumpcion y boberias;
Mas no le deja aventajarse:
No es justo que suframos demasias,
Le dice: Padre, tenga sufrimiento,
No haga salga el hombre de su tiento.
Y luego, dice: muestre los recados,
Que tiene por dó firma Licenciado,
Y de tambien, pues prebendados
Nombrar solo a sí el Rey se lo ha dejado.
Estando sobre aquestos muy trabados,
La cosa a tal estremo hubo llegado,
Que por fuerza el se determina
Partir para el Perú, y ya camina.
A Esteco se partió con gran enojo,
Que a su partir la fuerza le obligaba;
El Bachiller García diera un ojo
En trueco, por no ver lo que pasaba.
La barba, como dicen, en remojo
Echó, por ver la de otro se quemaba;
Con el se vá, porque temía
Que lo propio será de él otro dia.