Argentina y Conquista del Río de la Plata

con otros acaecimientos de los reinos del Perú, Tucumán y el Estado del Brasil

A me dio a su ce de que si fue ra

de no che a ques ta rui na do lo ri da

sin du da mu cha gen te pe re cie ra

sin po der es ca par se con la vi da

De su ca sa sa lir na die pu die ra

que le fue ra im po si ble la sa li da

pues e ra tan di cil con luz cla ra

qué fue ra si de no che les to ma ra

U na bo ca te rri ble y es pan to sa

es jun to a A re qui pa oh Dios E ter no

que vos hi cis teis co sa tan mos truo sa

que bien se di ce bo ca del in fier no

A qués ta di cen fue cau sa for zo sa

de a ques te te rre mo to y que el ca ver no

con fu ria le van la gran tor men ta

a quel vol cán a zu fre y fue go a vien ta

Pues no bas el tem blor tan es pan to so

pa ra que u na mes ti za se en men da se

que fra guan do te a un mal fa mo so

que qui so de su mal fa ma du ra se

La tris te no pu dien do ver su es po so

el Dia blo la a con se ja lo ma ta se

pen san do des po sar e lla con si go

a un mo zo que te a por a mi go

A mediodía sucede, que si fuera

de noche aquesta ruina dolorida,

sin duda mucha gente pereciera

sin poder escaparse con la vida.

De su casa salir nadie pudiera,

que le fuera imposible la salida;

pues era tan difícil con luz clara,

¿qué fuera si de noche les tomara?

Una boca terrible y espantosa

está junto a Arequipa, ¡oh, Dios Eterno!,

que vos hicisteis cosa tan mostruosa

que bien se dice boca del infierno.

Aquésta dicen fue causa forzosa

de aqueste terremoto, y que el caverno

con furia levantó la gran tormenta,

aquel volcán azufre y fuego avienta.

Pues no bastó el temblor tan espantoso

para que una mestiza se enmendase,

que fraguando tenía un mal famoso

que quiso de su mal fama durase.

La triste, no pudiendo ver su esposo,

el Diablo la aconseja lo matase,

pensando desposar ella consigo

a un mozo que tenía por amigo.

A mediodia sucede; que si fuera

De noche aquesta ruina dolorida,

Sin duda mucha gente pereciera

Sin poder escaparse con la vida.

De su casa salir nadie pudiera,

Que le fuera imposible la salida:

Pues era tan dificil con luz clara,

¿Qué fuera, si de noche les tomára?

Una boca terrible y espantosa

Está junto a Arequipa, ¡ó Dios Eterno!

Que vos hicisteis cosa tan mostruosa,

Que bien se dice boca del infierno.

Aquesta dicen fué causa forzosa

De aqueste terremoto, y que el caverno

Con furia levantó la gran tormenta;

Aquel volcan azufre y fuego avienta.

Pues no bastó el temblor tan espantoso

Para que una mestiza se enmendase,

Que fraguado tenia un mal famoso,

Que quiso de su mal fama durase.

La triste, no pudiendo ver su esposo,

El Diablo la aconseja le matase,

Pensando desposar ella consigo

A un mozo que tenia por amigo.

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2024 Argentina y Conquista del Río de la Plata. ISSN 1668-0001. CC BY 4.0