Argentina y Conquista del Río de la Plata

con otros acaecimientos de los reinos del Perú, Tucumán y el Estado del Brasil

Te a en el Vi rrey gran con fian za

la gen te que al del Cuz co per se guí a

te mien do del de Cuz co la pu jan za

al Ar zo bis po el Lu cio le tra í a

muy cie go por te ner de él con fian za

y a cuan to le di ce lo cre í a

Por su mal pa re cer y mal con se jo

al Con ci lio no vie ne Mo gro ve jo

Los o bis pos a quí le re qui rie ron

que al Con ci lio pre si da co mo sue le

a la i gle sia los cua tro se vi nie ron

Al Lu cio le con vie ne a ho ra que ve le

en tre él y el Ar zo bis po res pon die ron

El al ma y co ra zón a to dos due le

por ver tal di sen sión a tra ba da

en tre o bis pos por Lu cio en ca de na da

En con tra a San Mi guel bien se mos tra ba

del pa re cer de to dos los pre la dos

al Ar zo bis po él so lo se jun ta ba

Mas a a que llos que fue ron con gre ga dos

el Ar zo bis po pres to ex co mul ga ba

y en ta bli llas los po ne de cla ra dos

En a ques to el de Qui to muer to ha a

y Gra ne ro de go ta pa de a

Tenía en el Virrey gran confianza

la gente, que al del Cuzco perseguía;

temiendo del de Cuzco la pujanza,

al Arzobispo el Lucio le traía

muy ciego, por tener de él confianza,

y así cuanto le dice lo creía.

Por su mal parecer y mal consejo,

al Concilio no viene Mogrovejo.

Los obispos aquí le requirieron

que al Concilio presida, como suele;

a la iglesia los cuatro se vinieron.

Al Lucio le conviene ahora que vele;

entre él y el Arzobispo respondieron.

El alma y corazón a todos duele

por ver tal disensión así trabada

entre obispos, por Lucio encadenada.

En contra a San Miguel bien se mostraba

del parecer de todos los prelados,

al Arzobispo él solo se juntaba.

Mas a aquellos que fueron congregados,

el Arzobispo presto excomulgaba,

y en tablillas los pone declarados.

En aquesto el de Quito muerto había,

y Granero de gota padecía.

Tenia en el Virrey gran confianza

La gente, que al del Cuzco perseguia;

Temiendo del de Cuzco la pujanza,

Al Arzobispo el le traia

Muy ciego, por tener de él confianza;

Y así cuanto le dice lo creia.

Por su mal parecer y mal consejo,

Al Concilio no viene .

Los Obispos aquí le requirieron,

Que al Concilio presida, como suele,

A la iglesia los cuatro se vinieron:

Al le conviene ahora que vele;

Entre él y el Arzobispo respondieron.

El alma y corazon a todos duele,

Por ver tal disencion así trabada

Entre Obispos, por encadenada.

En contra a bien se mostraba

Del parecer de todos los prelados:

Al Arzobispo él solo se juntaba;

Mas a aquellos que fueron congregados,

El Arzobispo presto excomulgaba,

Y en tablillas los pone declarados.

En aquesto el de Quito muerto habia,

Y de gota padecia.

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2024 Argentina y Conquista del Río de la Plata. ISSN 1668-0001. CC BY 4.0