Argentina y Conquista del Río de la Plata

con otros acaecimientos de los reinos del Perú, Tucumán y el Estado del Brasil

I bi tu pué el as tu to y cau te lo so

con á ni mo fe roz jun ta pre go na

y man da co mo hom bre po de ro so

que ven ga en ge ne ral to da per so na

El ser te ni do ya por da di vo so

y que a tra ba jo al gu no no per do na

le ha ce al Gua ra ven ga con ten to

a la pre sen te jun ta y lla ma mien to

Con gen te a com pa ña do y pe cho fie ro

a la jun ta ha ve ni do Con du ri llo

el vie jo Ta bo gran car ni ce ro

tam bién a le gre vie ne con su a í llo

Ma ru ca su an ti guo com pa ñe ro

pro cu ra con sus fuer zas de se gui llo

con to da la de más ca na lla fie ra

que vi ve por la sie rra y cor di lle ra

En un pra do a pa ci ble y muy a me no

I bi tu pué te a a pa re ja do

de flo res o lo ro sas to do lle no

y de muy fres cas a guas ro de a do

Ten di dos por la yer ba y por el he no

se co men el con vi te y ha du ra do

des de el ho ra de pri ma has ta no na

mas nin gu no es ca sin ma za y mo na

Ibitupué, el astuto y cauteloso,

con ánimo feroz junta, pregona

y manda, como hombre poderoso,

que venga en general toda persona.

El ser tenido ya por dadivoso,

y que a trabajo alguno no perdona,

le hace al Guaraní venga contento

a la presente junta y llamamiento.

Con gente acompañado, y pecho fiero,

a la junta ha venido Condurillo;

el viejo Tabobá, gran carnicero,

también alegre viene con su aíllo;

Marucaré, su antiguo compañero,

procura con sus fuerzas de seguillo

con toda la demás canalla fiera

que vive por la sierra y cordillera.

En un prado apacible y muy ameno

Ibitupué tenía aparejado

de flores olorosas todo lleno

y de muy frescas aguas rodeado.

Tendidos por la yerba y por el heno,

se comenzó el convite, y ha durado

desde el hora de prima hasta nona,

mas ninguno escapó sin maza y mona.

, el astuto y cauteloso,

Con ánimo feroz junta, pregona,

Y manda, como hombre poderoso,

Que venga en general toda persona.

El ser tenido ya por dadivoso,

Y que a trabajo alguno no perdona,

Le hace al venga contento

A la presente junta y llamamiento.

Con gente acompañado, y pecho fiero

A la junta ha venido ,

El viejo , gran carnicero,

Tambien alegre viene con su aillo:

, su antiguo compañero,

Procura con sus fuerzas de seguillo

Con toda la demas canalla fiera,

Que vive por la Sierra, y Cordillera.

En un prado apacible y muy ameno,

tenia aparejado,

De flores olorosas todo lleno,

Y de muy frescas aguas rodeado.

Tendidos por la yerba, y por el heno,

Se comenzó el convite, y ha durado

Desde el hora de prima, hasta nona;

Mas ninguno escapó sin maza y mona.

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2024 Argentina y Conquista del Río de la Plata. ISSN 1668-0001. CC BY 4.0