Mas vien do que sus re tos son en va no
la ve la da Can dish des con fia do
San Se bas tián que es is la a llí cer ca no
to mar por re ha cer se ha pro cu ra do
No es tá le jos de a llí un lu si ta no
Sal va dor de Co rre a muy hon ra do
en nom bre de Fi li po en el Je ne ro
y o íd me lo que hi zo el ca ba lle ro
Al pun to que se su po que sur gi do
ha bí a en es ta is la el e ne mi go
con un pe cho y va lor en no ble ci do
que de ser vir al Rey es muy a mi go
se gún yo siem pre en él he co no ci do
y soy en mu chas co sas buen tes ti go
a su hi jo des pa cha por la pos ta
con gen te por la mar y por la cos ta
Tan bien lo hi zo el hi jo que lle gan do
do es ta ba el e ne mi go des cui da do
en un pun to le cer ca es co pe tan do
de suer te que a gran prie sa se ha em bar ca do
La vuel ta de la mar i ba to man do
y trein ta y cin co muer tos le han que da do
Con que que da Co rre a el mo zo u fa no
y más con ver que hu ye el lu te ra no
Mas viendo que sus retos son en vano,
la vela da Candish desconfiado.
San Sebastián, que es isla allí cercano,
tomar por rehacerse ha procurado.
No está lejos de allí un lusitano,
Salvador de Correa, muy honrado,
en nombre de Filipo en el Jenero,
y oídme lo que hizo el caballero.
Al punto que se supo que surgido
había en esta isla el enemigo,
con un pecho y valor ennoblecido
(que de servir al Rey es muy amigo,
según yo siempre en él he conocido,
y soy en muchas cosas buen testigo)
a su hijo despacha por la posta
con gente, por la mar y por la costa.
Tan bien lo hizo el hijo, que llegando
do estaba el enemigo descuidado,
en un punto le cerca, escopetando
de suerte que a gran priesa se ha embarcado.
La vuelta de la mar iba tomando,
y treinta y cinco muertos le han quedado.
Conque queda Correa, el mozo, ufano,
y más con ver que huye el luterano.
Mas viendo que sus retos son en vano
La vela dá desconfiado.
San Sebastian, que es isla allí cercano,
Tomar por rehacerse ha procurado:
No está lejos de allí un Lusitano,
, muy honrado,
En nombre de Filipo en el Genéro:
Y oidme lo que hizo el caballero.
Al punto que se supo que surgido
Habia en esta isla el enemigo,
Con un pecho y valor ennoblecido,
(Que de servir al Rey es muy amigo,
Segun yo siempre en él he conocido
Y soy en muchas cosas buen testigo)
A su hijo despacha por la posta
Con gente, por la mar y por la costa.
También lo hizo el hijo, que llegando
Dó estaba el enemigo descuidado,
En un punto le cerca, escopetando
De suerte, que a gran priesa se ha embarcado.
La vuelta de la mar iba tomando,
Y treinta y cinco muertos le han quedado,
Con que queda , el mozo, ufano,
Y mas con ver que huye el .