Argentina y Conquista del Río de la Plata

con otros acaecimientos de los reinos del Perú, Tucumán y el Estado del Brasil

Quién du da que San Pe dro co mo vi do

su tem plo de los ma los pro fa na do

pues fue de su Se ñor el e le gi do

por ca be za y pas tor de su ga na do

que no di jo Se ñor por qué has que ri do

a tu pas tor de jar de sam pa ra do

Mi ra que es en o pro bio tu re ba ño

re me dia buen Je sús tan cru do da ño

De a que llas on ce mil u na ca be za

los in gle ses tam bién en a quel a

a mal e cha ron San ta y ri ca pie za

Quién du da a Dios la Vir gen le di a

La in ju ria a vos Se ñor bien se en de re za

y con tra vos el mal se co me a

Pues sois pa ra ven gar la po de ro so

des tru ya vues tra dies tra al fla gi cio so

La fi gu ra de Dios cru ci fi ca do

que en la i gle sia y al tar de vo ta es ta ba

a quien el e ne mi go ha des ga rra do

y de e lla con o pro bio se bur la ba

pues re pre sen ta a Dios Ver bo En car na do

quién du da al Pa dre E ter no se que ja ba

y di ce Aun que Cor de ro muy be nig no

pe rez ca ya es te es ri tu ma lig no

Quién duda que San Pedro, como vido

su templo de los malos profanado,

pues fue de su Señor el elegido

por cabeza y pastor de su ganado,

que no dijo: "Señor, ¿por qué has querido

a tu pastor dejar desamparado?

Mira que está en oprobio tu rebaño,

remedia, buen Jesús, tan crudo daño".

De aquellas once mil, una cabeza

los ingleses también en aquel día

a mal echaron. ¡Santa y rica pieza!

Quién duda a Dios la Virgen le diría:

"La injuria a vos, Señor, bien se endereza,

y contra vos el mal se cometía.

Pues sois para vengarla poderoso,

destruya vuestra diestra al flagicioso".

La figura de Dios crucificado,

que en la iglesia y altar devota estaba,

a quien el enemigo ha desgarrado

y de ella con oprobio se burlaba,

pues representa a Dios Verbo Encarnado,

quién duda al Padre Eterno se quejaba,

y dice: "Aunque Cordero muy benigno,

perezca ya este espíritu maligno?".

¿Quien duda que San Pedro, como vido

Su templo de los malos profanado,

Pues fué de su Señor el elegido

Por, cabeza y pastor de su ganado,

Que no dijo:--¿Señor, porque has querido

A tu pastor dejar desamparado?

Mira que está en oprobio tu rebaño,

Remedia, buen Jesus, tan crudo daño.

De aquellas once mil, una cabeza

Los ingleses tambien en aquel dia

A mal echaron! ¡Santa y rica pieza!

¿Quien duda a Dios la Virgen le diría,

La injuria a vos, Señor, bien se endereza,

Y contra vos el mal se cometía,

Pues sois para vengarla poderoso,

Destruya vuestra diestra al flagicioso.

La figura de Dios crucificado,

Que en la iglesia y altar devota estaba,

A quien el enemigo ha desgarrado,

Y de ella con oprobio se burlaba,

Pues representa a Dios Verbo Encarnado,

¿Quien duda al Padre Eterno se quejaba,

Y dice: aunque Cordero muy benigno,

Perezca ya este espíritu maligno?

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2024 Argentina y Conquista del Río de la Plata. ISSN 1668-0001. CC BY 4.0