diendo éste que él y no otro debería mandar y gobernar en la ciudad, durante la ausencia, mientras que el dicho Diego de Abriego (Diego de Abreu ó Abrego) quería mandar sólo; mas thonn Francisco Manthossa, como capitán delegado y lugarteniente de Marthín Domenigo Eyolla (Irala), no quería consentírselo. A todo esto se armó una entre ellos, hasta que por fin Tiego de Abriego quedó dueño del campo, y derrotó y le cortó la cabeza á thonn Fran Manthossa.
CAPÍTULO L
MOTÍN DE ABREU. SCHMIDEL RECIBE CARTAS DE ESPAÑA
Entonces sin perder un instante puso á toda la tierra en alarma y quiso marchar contra nosotros aquí, y primero se fortificó en la ciudad; mientras esto llegamos nosotros con nuestro capitán Marthín Domenigo Eyolla (Irala), á las puertas de la ciudad, mas ni así quiso él dejarlo entrar á nuestro capitán, ni tampoco entregarle la ciudad, ni mucho menos reconocerle por señor.
Después que nuestro capitán se apercibió de la tal cosa, le pusimos nosotros cerco á la ciudad