Capítulo XIV
De las cosas que sucedieron en estas provincias después de la partida de
Habiendo llegado el capitán al puerto de Buenos Aires, y dado razón de las cosas de río arriba, se determinó que , con la más gente que pudiese, se fuese donde quedaba , que era el puerto de , a rehacerse de comida, por haber informado que había en cantidad, y los naturales haber dado la amistad y trato con nuestros españoles: con lo cual se puso en efecto, embarcándose en sus navíos toda la gente que cupo.
Fue caminando para , donde llegado que fue, sacó la mitad de la gente que allí había para llevarla consigo: con la cual, y la que él tenía, siguieron su viaje, llevando en su compañía al contador , que quedó con el oficio de su hermano, y al tesorero , y otros hombres principales: dejando en su lugar en Buenos Aires al capitán . Y siguiendo su derrota, pasaron grandes trabajos y necesidades hasta que llegaron a la casa fuerte, donde hallaron al capitán en grande amistad con los indios de aquella comarca; aunque la tierra muy falta de comida, procedido de una plaga general de que había talado todas las chácaras, con lo que y los de su compañía quedaron muy tristes.
En esta coyuntura llegó de arriba con sus navíos, porque habiendo aguardado al general más de ocho meses, la necesidad de comida le obligó a bajarse a rehacerse de lo necesario, y a dar carena a sus navíos que estaban muy mal parados, y así le fue forzoso llegarse a este puerto, donde y él tuvieron algunas competencias, de que resultó el prender a ; e interviniendo aquellos caballeros, fue luego suelto. De esta prisión resultó que con toda prisa se volvió río arriba, por ver si había alguna nueva del general , a quien dejaremos por ahora.
Volviendo al capitán , que habiendo recogido alguna comida, se volvió a Buenos Aires, y llegando a la fortaleza de , donde estaba por cabo el , propuso determinadamente dar sobre los indios , sin otra más razón que decir favorecían a unos indios rebelados contra los españoles. Y sin acuerdo