a vivir juntos, en aldeas, en una comunidad civil, donde los instruyeron en la religión cristiana, enseñándoles mecánica, a tocar instrumentos musicales y otras artes convenientes a la vida humana. De suerte que los misioneros, que vinieron por un motivo religioso, se ven ampliamente recompensados por las ventajas temporales que pueden cosechar aquí. La noticia de que existían minas de oro en esta región no se pudo tener tan secreta que los españoles no tuvieran conocimiento de ella, y entre otros, , Gobernador de Buenos Aires, quien hacia el año 1653 recibió órdenes del de ir a visitar esos establecimientos y examinar su riqueza. Al principio fue bien recibido, pero advirtiendo que empezaba a inspeccionar sus riquezas y buscar oro, tomaron las armas, obligándolo, a él y sus acompañantes, en número de cincuenta, a . El que le sucedió se informó más particularmente del asunto y para hacer mejor uso de sus conocimientos, entró en una estricta alianza con los jesuitas de su jurisdicción, quienes mantenían correspondencia
Relación de un viaje al Río de la Plata
y de allí por tierra al Perú con observaciones sobre los habitantes, sean indios o españoles, las ciudades, el comercio, la fertilidad y las riquezas de esta parte de América