Argentina y Conquista del Río de la Plata

con otros acaecimientos de los reinos del Perú, Tucumán y el Estado del Brasil

A cu de Ve nial vo que lo o ye ra

y con so ber bia gran de y a rro gan cia

al Ge ne ral ha blan do a di je ra

En e so pon go yo gran vi gi lan cia

por ser co sa que a mi per te ne cie ra

pues soy Ma e se de cam po y la ga nan cia

o pér di da del cam po se me a

co mo a quien bien sa béis per te ne a

El Ge ne ral res pon de A quel que tie ne

tal car go ha cer to do lo po si ble

en su tan to y ma ne ra le con vie ne

Ha ra se lo que fue re con ve ni ble

le di ce Ve nial vo y no le pe ne

Y pues que es cor te sa no y a pa ci ble

el vul go po pu lar en paz me ten ga

que con tra el Ta bor lán bas que ven ga

En su fal so con ten to mal ha bi do

es ta ban es tos tris tes pro cu ran do

sus ten tar el ti ni co par ti do

con tra quien lo im pi die se ba ta llan do

El in men so Se ñor ha so co rri do

con su fa vor en mu chos ins pi ran do

a co no cer el ye rro y el en ga ño

de su gran per di ción y tris te da ño

Acude Venialvo, que lo oyera,

y con soberbia grande y arrogancia

al General hablando, así dijera:

"En eso pongo yo gran vigilancia,

por ser cosa que a mi perteneciera,

pues soy Maese de campo, y la ganancia

o pérdida del campo se me fía,

como a quien bien sabéis pertenecía".

El General responde: "Aquel que tiene

tal cargo, hacer todo lo posible

en su tanto y manera le conviene".

"Harase lo que fuere convenible",

le dice Venialvo, "y no le pene.

Y pues que es cortesano y apacible

el vulgo popular, en paz me tenga,

que contra el Taborlán bastó que venga".

En su falso contento mal habido

estaban estos tristes, procurando

sustentar el titánico partido

contra quien lo impidiese, batallando.

El inmenso Señor ha socorrido

con su favor, en muchos inspirando

a conocer el yerro y el engaño

de su gran perdición y triste daño.

Acude , que lo oyera,

Y con soberbia grande y arrogancia

Al General hablando, asi dijera:

En eso pongo yo gran vigilancia,

Por ser cosa que a mi perteneciera,

Pues soy Maese de Campo, y la ganancia

O pérdida del campo se me fia,

Como a quien, bien sabeis, pertenecia.

El General responde: aquel que tiene

Tal cargo, hacer todo lo posible,

En su tanto y manera le conviene.

Haráse lo que fuere convenible,

Le dice , y no le pene;

Y pues que es cortesano y apacible

El vulgo popular, en paz me tenga,

Que contra el Taborlan bastó que venga.

En su falso contento mal habido

Estaban estos tristes, procurando

Sustentar el tiránico partido

Contra quien lo impidiese, batallando.

El inmenso Señor ha socorrido

Con su favor, en muchos inspirando

A conocer el yerro y el engaño

De su gran perdicion y triste daño.

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2024 Argentina y Conquista del Río de la Plata. ISSN 1668-0001. CC BY 4.0