su pueblo, mas no encontramos nada allí, ni mujeres ni hijos.
Entonces mandó nuestro capitán y tomó unos 150 arcabuceros y 2.500 Indios Caríos y marchó en pos de los Mayaiedess (Mbayá) 3 días seguidos y 2 noches [á todo apurar], así que no descansábamos nosotros sino sólo para comer á medio día y dormir 4 ó 5 horas cada noche.
Y al tercer día dimos con los Mayaeides (Mbayá) todos juntos, hombres, mujeres y niños en un bosque; mas no eran ellos los Maiaies (Mbayá) que buscábamos, sino sus amigos. Ni cuidado que se les daba á ellos de nuestra llegada allí. Así tienen que pagar justos por pecadores; porque cuando nosotros llegamos á los Mayaiess (Mbayá) estos, matamos y apresamos hombres, mujeres y niños en número como de 3 mil personas, y si hubiese sido de día, así como fué de noche, no se escapa uno de ellos; porque había mucha gente junta en un cerro, en que había un bosque muy grande. Yo saqué de esta escaramuza más de 19 personas, hombres y mujeres, que no eran viejas; porque siempre me ha gustado más la gente moza que la vieja; también la parte que me tocó de las mantas de los Indios y otras cosas más. Después de esto nos volvimos á nuestro real, allí nos quedamos 8 días, porque había