Relación de un viaje al Río de la Plata

y de allí por tierra al Perú con observaciones sobre los habitantes, sean indios o españoles, las ciudades, el comercio, la fertilidad y las riquezas de esta parte de América

su viaje, puesto que se vio obligado a desembarcar su cargamento y recostar su barco sobre uno de los costados para , izamos velas, y después de un viaje bastante perturbado por las tormentas que sufrimos, las cuales algunas veces nos arrojaban hacia la costa de Florida y algunas veces sobre otras, por fin descubrimos las costas de España. En lugar de ir hacia Cádiz, porque temíamos encontrarnos con los ingleses que estaban todavía en guerra con España, creímos conveniente hacer rumbo hacia Santander, adonde llegamos felizmente a mediados de agosto. Inmediatamente nos informamos de que la flota española venía a amarrar al mismo puerto a su regreso de México, por la misma razón que nos trajo a nosotros allí, y que habían izado velas sólo dos días antes de nuestro arribo. Y como los oficiales del que habían sido enviados, allí estaban todavía, pensamos que lo mejor era tratar con ellos, lo mismo para salvar la multa en que habíamos incurrido por no volver al mismo punto desde donde habíamos partido que para no ser molestados con su visita: y por cuatro mil patacones que les obsequiamos, fuimos excusados y declarados exentos de la revisación. Por lo tanto desembarcamos nuestra plata y otras mercaderías, parte de las cuales fueron enviadas después a Bilbao y parte a San Sebastián, donde en poco tiempo fueron vendidas y

Mantenido por hdlabconicet


  • 2025 Relación de un viaje al Río de la Plata. https://n2t.net/ark:/69774/rdv1943
  • Biblioteca digital. ISSN 3072-7715
  • CC BY 4.0
  • Marcelo T. de Alvear 1694 – Buenos Aires (CABA) – Argentina
  • secrit@conicet.gov.ar / hdlabconicet@gmail.com
  • Teléfono +54-11-4129-1158